Próximos pasos en la gestión de datos
HACIA UN FUTURO HÍBRIDO Y MULTICLOUD
Los avances tecnológicos y la digitalización que ha experimentado el mercado en los últimos años han provocado un aumento en la cantidad de datos que generan las empresas. Debido a la constante proliferación de nuevas tecnologías —como la inteligencia artificial o el blockchain— las empresas necesitan enviar, recibir y gestionar un volumen de datos que crece día a día de forma exponencial. Aprovechar mejor esta valiosa información resulta imprescindible en cualquier proceso de transformación hacia negocios cada vez más digitales.

En el contexto actual —en el que la interconexión entre compañías, partners y proveedores es una clave de evolución— los datacenters corporativos han quedado atrás frente a las posibilidades que ofrecen las plataformas globales de última generación. Además, la irrupción de las soluciones cloud ha ampliado el ámbito de actuación de los servicios de TI y, cada vez más, el mercado apunta hacia la necesidad de unir todo el potencial del datacenter con la flexibilidad que ofrecen los CSP (cloud services providers).
Ya sea por motivos de negocio, privacidad u otras razones, el mercado apunta hacia soluciones especializadas que cubran a la perfección cada una de sus necesidades específicas en cuanto a gestión de TI, y esta flexibilidad solo se encuentra en las soluciones híbridas.
Las compañías demandan infraestructuras en plataformas interconectadas a nivel global, sumado a la flexibilidad propia de los entornos cloud y haciendo uso de varias nubes para poder ampliar el abanico de necesidades cubiertas. Para poder gestionar todo esto, resulta fundamental poder formar parte de un ecosistema, en el que se encuentren integrados el resto de actores con los que las compañías se relacionan en su actividad de negocio, y que ofrezca conexión directa, privada, segura y ultrarrápida con todos ellos.
UN MUNDO MÁS INTERCONECTADO
La evolución de tecnologías como el IoT, y el aumento de aplicaciones móviles habilitadas por las redes 5G, exige una infraestructura informática y de red que se optimice para apoyar los servicios en el edge, proporcionando la mejor combinación de rendimiento y control a la vez que se aprovecha la agilidad de la nube.
La llegada del edge computing se ha convertido en un elemento fundamental para estas tecnologías emergentes, facilitando que tanto los dispositivos englobados en el IoT como otros ubicados en el extremo puedan disfrutar de una conexión más rápida en cuanto a tráfico de datos y respuesta computacional, a la vez que se benefician de una latencia mínima.
La llegada del edge computing se ha convertido en un elemento fundamental para estas tecnologías emergentes
Del mismo modo, la nube también ha cambiado las expectativas sobre cómo se despliegan las infraestructuras y los servicios de TI. Hoy en día, las empresas esperan una implementación con la agilidad de los entornoscloud y la capacidad de desplegar servicios de red donde y cuando sea necesario. Así como la virtualización ha transformado la forma en que se despliegan y gestionan los recursos informáticos y de almacenamiento, la virtualización de las funciones de red ha hecho lo mismo con este tipo de servicios. Como resultado, los métodos tradicionales de adquisición y despliegue de hardware de red están siendo sustituidos por funciones de red virtualizadas (VNF) que ofrecen rápidamente una funcionalidad equivalente sin la necesidad de realizar grandes inversiones en hardware.
Los métodos tradicionales de adquisición y despliegue de hardware de red están siendo sustituidos por funciones de red virtualizadas
De hecho, en el informe How to overcome four major challenges in edge computing elaborado por Gartner, se estima que más del 50% de los datos generados por las empresas se crearán y procesarán fuera de los datacenters o fuera de la nube para el 2022. En este sentido, ha emergido el Network Edge, que un sistema que proporciona servicios de red virtual donde funciona en una plataforma de infraestructura modular optimizada para el despliegue y la interconexión instantánea de los servicios de red. Este nuevo modelo permite seleccionar, desplegar y conectar servicios de red virtuales en el edge en cuestión de minutos, sin requisitos de hardware adicionales.
Network Edge facilitará a las empresas escalar o aumentar las soluciones de TI físicas existentes a través de sus servicios virtuales, mejorar el rendimiento con latencias ultra bajas, obtener flexibilidad de múltiples proveedores, reducir su tiempo de comercialización y construir un edge digital más cercano a los clientes, empleados, socios y ecosistemas para llegar a todas partes, interconectar a todos e integrar todo.
INTERCONEXIÓN SEGURA Y SOSTENIBLE
Esta tendencia hacia las infraestructuras distribuidas y el edge computing se une a otras dos igual de importantes: la seguridad y la sostenibilidad. Además de la importancia que tendrán los entornos multicloud híbridos para el almacenaje y la gestión de datos a lo largo de los próximos años, no hay que olvidar que cada vez es más necesario contar con un factor de seguridad fiable que salvaguarde toda la información que las empresas generan.
Network Edge facilitará a las empresas escalar o aumentar las soluciones de TI físicas existentes a través de sus servicios virtuales
Veremos una mayor complejidad en el uso de datos personales por la tendencia a regulaciones más estrictas, haciendo más difícil que las compañías globales distribuidas en múltiples mercados puedan operar con la mayor fluidez posible. Las nuevas capacidades de procesamiento de datos —como la computación segura multi-parte, la encriptación totalmente homomórfica y los enclaves seguros— se moverán hacia la corriente principal y permitirán que las empresas ejecuten su computación de una manera segura, aumentando la ciberseguridad.
Del mismo modo, la sostenibilidad también se convertirá en una prioridad para todas las organizaciones a nivel mundial. Las empresas están empezando a buscar proveedores de datacenter neutrales que estén comprometidos con la sostenibilidad ambiental.